Temores

TEMORES

No temo a tu locura,

Sino que me la contagies.

No temo a los perros,

Sino a las vacunas contra la rabia.

No temo a los cerdos,

Sino a la triquina.

No temo a tu cariño,

Sino a que algún día me dejes.

Pedro temblando.

En el desierto

EN EL DESIERTO

El mar de arena del desierto.

Su silencio blanco de sonido,

Provoca surfear una duna.

Pero ahogo mis deseos,

Con pensamientos de soledad.

Solo en un mundo de arena,

Sin edificios bulliciosos,

Sin caminos con motores ruidosos,

Sin señal para aparatos modernos.

Solo la lagartija que pregunta,

Si se puede vivir sin celular.

Pedro en Egiptoica.

Hambre de cariño

HAMBRE DE CARIÑO

Su sed de conocimientos

Lo hacía sentir como una planta,

Lejos de una  fuente de agua.

Su necesidad de calor

Lo hacia sentir,

Como un planeta fuera del sol.

Su hambre  de cariño

Hizo que como una espada desnuda

Atravesara su pecho izquierdo

Y se alojara contento,

En el centro de su corazón.

Pedro espadachín