viernes, 28 de septiembre de 2018
Caballo
El caballo quiere que yo corra como él. Que coma heno y cebada chancada como él. Me mira y se pregunta cómo puedo caminar en dos patas. Cómo me monto en su lomo y me lleva a ninguna parte. Pero sabe que somos amigos.El me cuida y alimenta - dice para sí. Tengo suerte de ser su amigo -se felicita. Pero no, yo quiero correr por los campos -se reclama.Tomar agua del arroyo. Buscar sombra de un gran árbol, dormir a la orilla de un manantial. Llamar a la manada del galope al descanso y del descanso al galope. Ya no soy su arma de guerra -refiriéndose al hombre. Ahora soy su juguete de carne y hueso. Estoy esperando a mi salvador -casi como orando. Que venga a juzgar a los vivos y a los muertos. Que nos regrese al paraíso de los caballos, del cual salimos por un pecado que nunca cometimos. No hemos comido ninguna fruta prohibida de ningún árbol del Paraíso. No somos amigos de ninguna serpiente.
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