LA JUSTICIA DE LA HORMIGA
Somos testigos de tantas injusticias Hermanos. Pero nosotros los Masones tenemos que luchar para que esto cambie. En Botánica hay una planta llamada Justicia, de la tribu de las Justicias, de flores aisladas en espigas o en manojos. A estas plantas llamadas justicias, les podrán cortar todas las flores, pero no podrán detener la primavera. Es decir la Justicia siempre se impondrá.
La Justicia debe ser como la muerte, es decir para todos por igual. ( Montesquieu)
En principio todo ser humano debe ser tratado como una persona digna, no como un objeto, es lo más elemental de la Justicia, ya que todo ser humano para subsistir necesita satisfacer necesidades materiales, sociales y espirituales.
El hombre justo es bueno, digno y honorable. Este sello inherente a la calidad de la persona implica una mayor observancia entre nosotros los Masones. Nuestro ritual en lo referente a quienes son los llamados a ser Masones dice sabiamente: ¨Los hombres justos, rectos y libres, de edad madura de sano juicio y severa moral”. Por tanto, ser justo no es solo cumplir con las leyes o aplicar una sentencia; es vivir en armonía con todos los valores positivos. Entender que la justicia es inspirada por el amor.
Ramiro de Maeztu dice: “La justicia no triunfará por sí sola. Para que triunfe ha de tener soldados que peleen por ella”.
Un hombre toca la puerta de la Justicia. Sale el portero. ¿Qué desea? Deseo Justicia. Espere afuerita una semana. A la semana toca de nuevo. Quiero Justicia. Espere sentadito otra semana y así semana tras semana. Hasta que viene otro hombre y toca la puerta. Deseo Justicia. Espere sentadito al costadito del otro señor una semana. Pero este hombre recién llegado rompe a patadas la puerta e ingresa a la Justicia. El que estaba esperando antes le dice al portero: Mi estimado amigo, yo pido con respeto, suavidad y paciencia y Ud. Me hace esperar. Ese Señor se mete a patadas rompiendo la puerta. Qué es lo que pasa. Y el portero le responde: “Amigo, la justicia no se mendiga. ¡ La justicia se exige!”
Si la justicia está basada en el amor, comprometámonos nosotros los Masones a ser justos entre nosotros y no permitamos jamás que la maledicencia caiga sobre ningún Masón desde el Gran Maestro al último de los Iniciados. Que ningún Masón sea acusado de algo sin pruebas ni calumniado en cualquier tiempo y lugar.
El que le busca tetas a la hormiga. Hasta sostenes le compra.
No es un cuento.
Q:.H:. Pedro Moreno Sarmiento R:.L:.S:. “Trabajo y Honradez” Nº17
No hay comentarios:
Publicar un comentario